Decora de miedo en Halloween

En Kave Home nos encanta adaptar la decoración a las estaciones y festividades del momento. Y… no se nos ocurre mejor momento para hacerlo que ahora que Halloween está a puntito de llegar.

Decoración de miedo

Si eres de los nuestros y quieres ambientar tu casa con un toque tenebroso 100% Halloween te recomendamos que sigas leyendo. Porque cada vez son más los países europeos que se animan a celebrarlo. Por supuesto, no pueden faltar las calabazas, pero tampoco velas negras, relacionadas con las artes oscuras, que te ayudarán a crear un ambiente lleno de misticismo.

Halloween en la mesa

Halloween puede convertirse en una fiesta temática de lo más divertida en la que los invitados acuden disfrazados de brujas, vampiros y seres varios, y el anfitrión viste la casa para la ocasión. Telarañas y esqueletos son de lo más adecuados para vestir la mesa con un toque terrorífico. Se trata de añadir accesorios en la decoración de la mesa, porque es el gran centro de atención en cualquier cena. Eso sí, sin olvidarnos de la importancia de teñir el ambiente de naranja y negro, los colores protagonistas de esta festividad. Una guirnalda de calabazas puede ser uno de esos detalles que marque la diferencia, juega con los distintos elementos decorativos para que tu fiesta temática tenga una decoración de 10.

¿Truco o trato?

Niños con terroríficos disfraces recorriendo las calles en búsqueda de caramelos al son de ¿truco o trato? es la estampa que a todos nos viene a la cabeza cuando pensamos en Halloween. ¡Pero también es una magnífica oportunidad para hacer manualidades con los más pequeños! Y es que aunque esta fiesta haya ganado mucha popularidad en Estados Unidos, la celebración se remonta a más de 2500 años atrás.

Noche de Samhain

Halloween es una festividad pagana que se celebra la víspera de Todos los Santos, la noche del 31 de octubre. Es la noche en la que nuestro mundo y el del más allá se encuentran y es que los chamanes célticos, los druidas, creían que en la noche del 31 de octubre los espíritus regresaban a la tierra para llevarse consigo a los vivos. La noche del Samhain, tal y como los pueblos celtas de Irlanda la conocían, era un rito que conmemoraba el final de la temporada de cosechas y el inicio del invierno.

Las grandes hogueras y los conjuros con atuendos que incluían máscaras y trajes fantasmales se realizaban para ahuyentar a los malos espíritus. Pero no solo se ha conservado esta tradición de Halloween, las calabazas que ahora decoran casas y jardines también se utilizaban por aquel entonces. Los pueblos celtas de Irlanda creían que decorando las ventanas con calabazas ahuecadas y decoradas con velas ayudaban a sus familiares difuntos a encontrar el camino de vuelta al mundo de los vivos.