
Tu casa, el mejor lugar donde estar
En esta vida, no todo se consigue con dinero. Te lo vamos a demostrar con un DIY, o lo que es lo mismo un hazlo-tú-mismo, sobre lámparas hechas a partir de botellas de cristal. Bueno sí, deberás hacer una mínima inversión pero el resultado vale mucho la pena. ¡Asegurado!
Hay recipientes de cristal que son auténticas obras de arte. ¿No te ha ocurrido alguna vez que te ha dado lástima tirar botellas después de usarlas? Ahora puedes aprovecharlas y hacer que formen parte de tu decoración. Además, tendrás un elemento decorativo único y especial, ¡y por muy poquito!
Para empezar, necesitarás una botella, tarro o cualquier recipiente de cristal que consideres digno de resaltar en tu hogar. Puede ser de vidrio tintado, con letras en relieve, con o sin etiqueta... Eso lo dejamos a tu gusto y estilo.
Materiales:
Si quieres una preciosa lámpara de mesa, necesitarás un kit eléctrico (cable con interruptor, casquillo y adaptador). No hace falta que te rompas mucho el coco. Si vas a cualquier ferretería hay kits que vienen preparados con todo lo justo y necesario. A partir de aquí, hay dos opciones, dependiendo de las ganas y paciencia que tengas puedes optar por:
Personalmente, nos gusta más la primera opción porque integra el sistema de iluminación dentro de la misma lámpara y queda muy original. Pero entendemos que cuanto menos complicado sea, mucho mejor.
Seguiremos con la colocación de la bombilla. Si necesitas una luz potente, elige una de luz blanca. Para un ambiente más cálido e íntimo puedes escoger una luz cálida y relajante.
Y ya para acabar, coloca el panel que más te guste. ¡Así de fácil!
Materiales:
Instala el sistema eléctrico y la estructura de la lámpara. Seguidamente, introduce las botellas dentro de los pinchos. Et voilà! Así de sencillo es tener una lámpara de techo que aporte un toque diferente a tu estancia.
Otra opción es hacerlo con tarros o tazas de cristal. El proceso será un poco más complejo ya que hay que cortar el cristal para poder colocar la bombilla dentro. Si navegas por Internet hay muchos vídeos sobre cómo hacerlo, pero si no te atreves siempre puedes acudir al cristalero.
Anímate a conseguir una pieza hecha por y para ti que no va a dejar indiferente a nadie. Además, puedes renovarla cuando quieras y darle un giro a tu decoración simplemente cambiando los recipientes de cristal. Suena bien, ¿no?
Da una segunda vida a tus muebles, colchones, edredones y almohadas. Cuando los quieras renovar, si los antiguos todavía están en buenas condiciones, los puedes donar a una organización de economía social y solidaria, cerca de tu casa. Si no, los puedes dejar en el centro de recogida de residuos, en el contenedor para los muebles utilizados.
Estos productos recogidos en los contenedores de mobiliario, se envían a centros de clasificación donde los materiales se separan según material (madera, chatarra, plástico...) para transformarlos en nuevas materias primas recicladas y se utilizan para fabricar otros productos o para ser recuperados en forma de energía, utilizada como combustible en plantas de cemento.
Encuentra todos los puntos de recogida para dar/tirar el mobiliario utilizado, cerca de tu casa eco-mobilier.fr
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