Si te imaginaras un lugar donde escapar y evadirte de todo, seguramente se parecería mucho a la casa de Asturias de Miguel Carrizo. Te descubrimos el interior de su pequeño tesoro escondido entre montañas y con vistas al mar.

Polifacético por naturaleza y con una brillante sonrisa que lo caracteriza, cuesta encasillar a Miguel en una sola profesión: periodista, influencer, fotógrafo, modelo… él es todo eso y mucho más. Ha colaborado con prestigiosas marcas como Loubotin, Moschino y Diesel y su savoir faire queda impregnado en todo aquello que hace.

Entre mar y montaña

Aunque vive en Madrid, tiene el lugar perfecto para huir del ajetreo de la capital y disfrutar de la paz absoluta. La casa se encuentra en Abeu, un pueblo cerca de Ribadesella (Asturias) que tiene el privilegio de contar al mismo tiempo con vistas al Mar Cantábrico y a Los Picos de Europa. Se la compró a un amigo y decidió reformarla para convertirla en un espacio totalmente nuevo y con un aura muy especial: “Tiene una luz espectacular. Los amaneceres y atardeceres son únicos y por la noche también se ve el faro, que con su luz te recuerda que estás en la costa”.

Una luz indirecta y acogedora, los muebles de madera y una localización de ensueño hacen patente la voluntad de recrear una especie de cabaña danesa, por lo que el estilo a seguir no podía ser otro que el nórdico. Principalmente, se ha centrado en la elección de muebles de madera con tonos neutros como el gris y el blanco. Aunque también se encuentran algunas referencias marineras como las luces que hay fuera, ya que la casa está orientada al mar.

El concepto de interiorismo lo diseñó junto con su mejor amigo, el arquitecto Bilbo García-Conde: “Al ser una casa pequeña nos guiamos por la ubicación y quisimos tener el salón y porches principales orientados al sur para aprovechar al máximo la luz y el calor”.

Para Miguel, lo imprescindible para sentirse como en casa es una luz agradable, el cálido fuego de la chimenea, unas buenas velas y una alfombra acogedora, por lo que no es de extrañar que su estancia favorita, y donde más tiempo le gusta pasar, es en el salón.

Miguel reconoce que lo suyo con nuestra silla Dreaming fue love at first sight: "Es preciosa además de comodísima".

9 lipca 2020 09:59