Unas oficinas de diseño
Tenlo claro. Tu mesa de centro también es de portada. ¿Quieres saber cómo? En este post te damos las claves para que sea la protagonista del salón. Y prepárate para lo mejor, porque nunca hubieras imaginado que sería tan fácil. ¡Vamos a ello!
Antes de nada, divide y reparte
Divide tu mesa en cuatro cuadrantes. En uno de ellos coloca los objetos más pesados, como libros y revistas, y en el lado opuesto otros más pequeños y dispares como gafas y tablet. Usa los dos cuadrantes restantes para aligerar la mesa con accesorios de decoración como un jarrón con flores o un conjunto de velas.
¿Y si mi mesa no es rectangular?
Si tu mesa es cuadrada, divídela en diagonal de modo que se divida en dos triángulos. Eso sí, es importante que no la llenes mucho para que el sobre también tenga protagonismo.
Para mesas redondas, lo mejor es aprovechar el centro con elementos que acompañen a su forma, como bandejas o centros de mesa.
Un juego de altura
Una vez repartido el peso de los componentes de la mesa de centro, juega con sus alturas para dar sensación de movimiento. Los jarrones de diferentes tamaños y colores son un acierto seguro. Además, crean un punto de brillo y luz.
Outfit de verano e invierno
Si quieres que tu salón participe de cada estación del año, las bandejas y centros de mesa son ideales para colocar elementos como pechinas o piñas de pino. Gracias a un solo accesorio, consigues decoraciones distintas.
Un poco de verde no falla
Ramos de flores, plantas de interior, terrarios… La naturaleza siempre es bien recibida en cualquier lugar de la casa, también en la mesa del salón. Y si no tienes tiempo para cuidarlas, nuestras plantas decorativas son tus mejores compañeras.
Menos es más
Si tienes un set de mesas nido, no caigas en el error de decorarlas todas. Lo más aconsejable es que pongas objetos en la mesa superior y que uses las demás cuando las necesites como mesas auxiliares.