Coraje, acción y pasión, pero también fuerza y una actitud positiva ante la vida. Así es el rojo y, nada que ver con las casualidades, pero si con las causalidades, así es Sandra Rojo. Fotógrafa de profesión y por vocación, Sandra es una mujer que pone algo de sí misma en todo lo que hace. Te la presentamos.
Lo de llamarse Sandra Rojo le viene como anillo al dedo, aunque el nombre surgiera fruto de un error. Ella es una de esas personas que envuelven. Activa, casi tanto como expresiva, segura de sí misma y con las ideas muy claras. Toda ella inspira y transmite una energía arrolladora y un buen rollo que hace que, más que una entrevista, esto sea una conversación. A lo que iba: siempre supo que quería ser fotógrafa, pero le costó dar el paso. No fue hasta después de un bache profesional que viró de rumbo hacia la fotografía. Eso y el ánimo que le infundó el libro de Eva Sandoval ¿Y tú qué crees? Reconoce que le enseñó a creer en ella misma y a convertirse al positivismo.
"Para dedicarte a una profesión artística primero te lo tienes que creer, creerte que eres capaz. En realidad, ¡necesitas creer en ti antes de hacer cualquier cosa!"Sandra Rojo
Mirada personal
Sandra Rojo se dedica a la fotografía de espacios, aunque siempre se ha sentido atraída por la arquitectura. Es muy clara cuando habla de este mundo: “tanto la fotografía de interiores como la de arquitectura está dominada por hombres casi en su totalidad. Ellos son más técnicos, más descriptivos y más documentales. Pero yo necesito ver la parte artística de todo lo que hago, porque para mí un espacio no es solo un espacio. Siempre tiene algo de la persona que lo ha creado y hay detalles que, aunque a simple vista puedan parecer banales, para mí no lo son”.
Ese algo que pone de sí misma en cada fotografía es percibido por los demás, que coinciden en que sus imágenes tienen alma. “Para mí la imagen es mi forma de comunicarme con el resto del mundo. Es mi herramienta, la manera que tengo de contar mi historia a través de lo que yo entiendo y veo, de cómo lo pienso y lo siento”. Así responde Sandra Rojo cuando se le pregunta qué es para ella la imagen.
Y es que Sandra se mueve por emociones. Cuando conoce a alguien que le transmite algo que ella define como interesante, no puede controlar las ganas de entrar en su casa a hacer fotos. Lo emocional y lo profesional se entremezclan en ella, que explora su lado más voyeur fotografiando los interiores de esa gente interesante para su proyecto The Domo Project. En él desarrolla lo que más le gusta hacer, fotografiar interiores, pero con un añadido: hacerlo con las personas que lo habitan dentro. Es un reto añadido para ella, acostumbrada a fotografiar interiores, ya que con las personas todo cambia, lo importante no es la foto, es cómo te comunicas con ellas para conseguir la foto. Paciencia y empatía son el quid de la cuestión.
“Tu casa eres tú. Tu casa es tu refugio y habla de ti. Es tu mundo interior, un reflejo de tu personalidad."Sandra Rojo
Dice que detrás de una persona con un proyecto chulo, te encuentras una casa chula. Y lo mismo pasa con una persona interesante… Por eso el día que se cruzó con una chica asiática en una cafetería tomando algo, le llamó la atención su look y, sin pensárselo mucho, se acercó y le propuso hacerle un reportaje. No la conocía de nada, pero se presentó en su casa días más tarde. ¿El resultado? Puedes verlo aquí.
En su wishlist de casas a fotografiar están, entre otras, la Villa Savoye o la casa de Lou Doillon, actriz, modelo y cantautora. No es que su casa sea espectacular, que también, es que le parece un personaje muy enigmático. Y ya cuando descubrió que nacieron el mismo día, del mismo mes, del mismo año… demasiada casualidad. ¿O será causalidad?
Créditos:
Imágenes de Sandra Rojo.
Retrato de Sandra Rojo por Angie López.