We spraken met Made Studio over het ontwerpproces van Joncols
Las cestas de fibras naturales se han convertido en un elemento indispensable dentro de nuestras casas. De mimbre o de ratán, las podemos encontrar en todas las formas y colores imaginables. Y es que es innegable que poseen un magnetismo especial que transfieren a cualquier estancia donde estén ubicadas. Te desvelamos todos sus encantos y por qué las debes tener en casa (si es que no las tienes ya).
Aunque no lo creamos, el arte de la cestería se remonta siglos atrás. Es una de las prácticas de artesanía más antiguas que existen y toma como base fibras naturales como el mimbre o el ratán. Su pieza estrella es la cesta pero se elaboran todo tipo de muebles como sillones o mesas, que tuvieron su máximo esplendor en la década de los 50 y 60.
Viaje al pasado
Su larga historia nos evoca a tiempos pasados donde primaba lo natural y lo artesano. Y es justamente esa naturalidad la que nos tiene completamente embelesados. En la actualidad, se convierte en el complemento perfecto para embellecer lo cotidiano y darle ese toque cálido y acogedor tan deseado a nuestra decoración.
Todo en uno
Si hay algo de lo que pueden presumir las cestas es de su multifuncionalidad. Si eres un amante de las plantas, sabrás que desde hace ya un par de temporadas han sustituido a los maceteros convencionales y se han convertido en un must have (y también te lo contamos en nuestro post 5 ideas para decorar tu casa con plantas y 2 libros maravillosos).
Pero eso no es todo, sus funciones se extienden hasta límites insospechados. También son perfectas como almacenamiento adicional ya que ayudan a distribuir los espacios más reducidos sin dejar a un lado la parte estética. En muchas ocasiones, se convierten en el cajón de sastre de todo aquello que no sabemos dónde ubicar.
Ricas en fibra
Las fibras naturales, aunque no lo parezcan, son muy resistentes y duraderas. Otra de sus cualidades más veneradas es que son transpirables. Esto es indispensable si estás pensando en usar las cestas para guardar ropa o textiles como plaids y cojines. De este modo, evitarás los malos olores que se generan por la humedad. Además, al ser tan ligeras permiten ser movidas con facilidad y adaptarlas a cualquier espacio sin grandes esfuerzos.
Pon una cesta en tu vida
En cuánto a decoración, las posibilidades de las cestas son infinitas. Su gran variedad de modelos permite que se ajusten a todos los estilos como el rústico, el boho o el étnico dónde añaden un plus de calidez y naturalidad. Sin embargo, se han ido asentando en otros más dispares como el nórdico o el vintage.
Seguro que, como nosotros, tú también has caído rendido a los encantos de las cestas. ¡Y no es de extrañar! Echa un vistazo a nuestra selección de cestas, te encantarán. Cuéntanos qué función cumplen en tu casa, seguro que descubrimos alguna nueva.