Oficialmente es primavera. Y eso significa que ya queda menos para el verano. Te proponemos un deco summer festival para tu terraza. Cinco propuestas con las que dar un aire nuevo a tu oasis exterior, que bien se lo merece por tan buenos momentos que te hace pasar. Sea grande o pequeña, para desayunar o ver atardecer, para disfrutar solo o en compañía… ¡te van a gustar!

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Get the look

Para las terrazas más urbanitas o las que miran a la montaña. Tonos naturales con piezas sencillas que encajan dentro y fuera de casa. No necesitas más, ríndete a la vida sencilla (aunque total design) con una composición en la que tres son multitud: un par de sillas y una mesita auxiliar. Todo en materiales con protección UV y un tratamiento especial que garantiza una mayor durabilidad de tus muebles.

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Siéntete como en casa

Exactamente, como dentro de casa. Pero estarás fuera. Sintiendo la brisa y el solecito. Y es que la terraza es una extensión de tu salón y en los meses de buen tiempo la vida se prolonga. Para esos momentos de reunión, de sobremesas que se alargan, de animadas charlas, decora el espacio con cómodos sillones de exterior, mullidos almohadones y completa la zona con un par de pufs o cojines de suelo alrededor de la mesa de centro.

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¿Adicto al terraceo?

Sin duda, un vicio confesable. Nos gusta el terraceo. Una cerveza, un picoteo, una ensalada y una tabla de quesos. ¡Da igual el menú! Todo sabe mejor en la terraza. Solo necesitas una mesa y unas sillas para tenerla lista. Que te horroriza el suelo que tienes: instala un vinílico encima (es estupendo para transformar en cuestión de horas) o cúbrelo con un par de alfombras de exterior. Añade algunas plantas, unos farolillos con velas y ¡voilá! Tira de contactos y escribe: “mañana, a las 20h, inauguro la temporada de terraza”.

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Keep calm and live outdoor

Tú no quieres compartir tu terraza. ¡Es tu tesoro! Sueñas con llegar a casa y dedicarte a ti, a esa lectura, a perderte en Instagram, sin zapatos, con ropa cómoda… It’s your moment! Tu terraza pide a gritos una butaca o sillón con un reposapiés, una alfombra de exterior –tu pie descalzo agradecerá el tacto cuando pises- y una mesita en la que dejar el cóctel. Y es entonces cuando te das cuenta: qué poquito necesitas para ser feliz.

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¿Salimos a comer?

A diario o en fin de semana: eat & love. Una comida, un aperitivo o un desayuno. Porque los desayunos cuando la ciudad se despierta son uno de esos mundanos placeres que reconfortan. Es casi terapéutico: te aseguramos que el día en la oficina se lleva mejor. Prepara tu terraza para esas ocasiones con una mesa alta y taburetes. Informal, práctico y comedor resuelto en poco espacio. Coloca algunas plantas en bonitas macetas de cemento y cestos de fibra, deja que suene jazz de fondo y no querrás entrar.  

9 de Julho de 2020 às 09:52